sábado, 15 de noviembre de 2008

Duelo de "titanas"

Estas dos no tienen nada que hacer más que tirarse de los pelos... yo creo que es por puro aburrimiento pero es hasta gracioso... La tensión está servida.

Quintana a Campos: '¿Yo te caigo mal?'

MADRID.- Había morbo. Mucho. Y la entrevista no defraudó. María Teresa Campos y Ana Rosa Quintana, frente a frente. Nada de poses. Las cosas a la cara. Reproches. "¿Yo te caigo mal?", pregunta Quintana. "Tú has levantado el hacha de guerra. Es mejor decirnos los fantasmas a la cara", responde Campos.

Durante muchos años -¿ahora también?- rivales. Cada una en su bando, lucha encarnizada por la audiencia. Dos 'reinas' enfrentadas. Ahora, por primera vez, compañeras en la misma cadena. Compañeras, que no amigas. Quintana lo deja claro: "Nunca hemos tenido una amistad personal. Hemos tenido amigos comunes pero nunca nos hemos ido a cenar".

Una entrevista para hablar de ellas. Pero sin superficialidades. Los trapos sucios y los reproches no tardan en salir. Mucha personalidad en el plató:

- Quintana: ¿Yo te caigo mal?

- Campos: A veces habré hecho cosas que te molesten...

- Q: Algunos tiritos me has pegado

- C: Si empiezas así me das pie para que te diga, si tuviera alguna queja, que en momentos difíciles pensara 'cómo es posible que esté callada'. Me hubiera gustado que dieras la cara. Que miraras a la cámara y dijeras: 'Teresa estoy contigo'.

- Q: Eres injusta...

- C: Tú has levantado el hacha de guerra, así que mejor decirnos los fantasmas a la cara.

Apenas un minuto y medio de entrevista y las expectativas están más que cumplidas. Nada de regalarse el oído. Mejor limar asperezas ante la audiencia. Campos insiste en que echó de menos que Quintana, cuando ella cambió de cadena y sufrió tantas críticas, saliera en su defensa. Unas palabras de cariño. "Es mi política. En mi vida he contestado a los confidenciales", se defiende Quintana.

De repente, como si las dos periodistas entendiesen que la tensión es demasiada, rebajan el tono. La palabra 'respeto' se repite una, dos, tres veces. Quintana cambia de tercio abruptamente: "María Teresa, ¿cómo estás? ¿Cómo te estás recuperando?".

La anestesia dura segundos. Son muchos años de profesión y de competencia. También son conscientes de la expectación levantada por este encuentro. Campos, a la que se ve a gusto, vuelve a la carga. El tema central es ahora el dinero. Lo que ellas ganan.

- Campos: Ahí podía tener otro pique contigo.

- Quintana: ¿Tú sabes lo que gano yo?

- C: La cosa es que siempre se ha hablado de lo que yo gano, pero no de lo que ganas tú...

Campos toma la iniciativa ahora para volver a rebajar la tensión. Ya se sabe que el dinero es un tema delicado. "¿No íbamos a hablar de Roldán?", pregunta. No se sabe muy bien quién es la entrevistadora y quién la entrevistada. Las dos se reservaban un final de traca. Siempre sonrientes, pero siempre invitando a leer entre líneas.

- Campos: Ana Rosa, ¡qué delgada estás!

- Quintana: Me he puesto a dieta porque venías.

- T: Para hacerme más gorda a mí... En cualquier caso nos tiene que ir bien a las dos porque nos ha unido el destino. Y, en esto de las 'reinas de las mañanas', me gustaría decir que yo sólo soy la 'reina madre'.

- Q: Y yo soy republicana, así que imagínate.


Esta noticia está en El Mundo.

Aquí tenéis también una parte de la entrevista, es para mondarse...

martes, 11 de noviembre de 2008

"Regalao" es caro

¡La crisis arrasa con todo! ¡El mundo como lo conocemos ahora va a desaparecer!...
Me encanta el titular... Las drojas del colacao...

Las rebajas llegan a las drogas

La crisis abarata los estupefacientes - Hay 'éxtasis' a un euro o gratis con la 'coca' - El nuevo hábito, 'puchero' de cuatro sustancias


Éxtasis a un euro. A dos, a tres, a cinco a lo sumo. Incluso se puede conseguir una pastilla gratis si se compra cocaína o se adquiere la solución de éxtasis que se chupa y que se conoce como cristal. Ésta, a su vez, se puede conseguir a 20 euros el medio gramo, porque ha perdido del todo la pátina de glamour que tenía pocos años atrás, cuando apareció en España. El compuesto anfetamínico speed, preparado para esnifar, se vende entre 10 y 16 euros el gramo. El LSD a 15 euros. El anestésico ketamina cuesta 25 euros medio gramo mezclado con cocaína, para aguantar la fiesta.

Con la crisis, las drogas cuestan menos dinero. A veces con calidad bajo cero. Pero efectivas para la evasión brutal. "Más o menos todas las drogas han descendido el precio", explica Juan José Llopis, psiquiatra especialista en conductas adictivas y coordinador de la Unidad de Conductas Adictivas de Castellón. "El consumidor recreativo, el mayoritario entre los jóvenes de España, está apuntándose a las drogas cuyo efecto, con menos dosis, dura más tiempo. Por ello, lo que percibimos paulatinamente", añade, "es la existencia de un arco de consumidores a partir de los 16 años que puede espaciar las salidas festivas para ahorrar dinero, pero que busca el desfase duro rápido. Ahora los consumidores beben en los aparcamientos para ahorrar, pero mezclan más sustancias que en otros tiempos".[...]

Lee el resto del artículo en El País.